Bueno heme aqui escribiendo a fin de mes y lo que puedo decir de este mes es k no fue lo que esperaba... Pero bueno cuando han visto que lo que deseas pase se cumpla exactamente al pie de la letra, ni modos a aprender del mes y a prepararnos para el proximo el mes que mas odio por cierto, ya que todos andan en la etapa cursi que yo como grinch antiamor odio asi que para estas ocasiones especiales...
Era una bella princesa que estaba buscando consorte...
Entre los candidatos se encontraba un joven plebeyo, que no tenía más riquezas que amor y perseverancia.
Cuando le llegó el momento de hablar, dijo:
Princesa, te he amado toda mi vida. Como soy un hombre pobre y no tengo tesoros para darte, te ofrezco mi sacrificio como prueba de amor. Estaré cien días sentado bajo tu ventana, sin más alimentos que la lluvia y sin más ropas que las que llevo puestas. Ésa es mi dote.
La princesa, conmovida por semejante gesto de amor, decidió aceptar.
Tendrás tu oportunidad, si pasas la prueba, me desposarás.
Así pasaron las horas y los días. El pretendiente estuvo sentado, soportando los vientos, la nieve y las noches heladas.
Sin pestañear, con la vista fija en el balcón de su amada, el valiente vasallo siguió firme en su empeño, sin desfallecer un momento.
De vez en cuando la cortina de la ventana real dejaba traslucir la esbelta figura de la princesa, la cual, con un noble gesto y una sonrisa, aprobaba la faena.
Todo iba a las mil maravillas. Incluso algunos optimistas habían comenzado a planear los festejos. Al llegar el día noventa y nueve, los pobladores de la zona habían salido a animar al próximo monarca.
Todo era alegría y jolgorio, hasta que de pronto, cuando faltaba una hora para cumplirse el plazo, ante la mirada atónita de los asistentes y la perplejidad de la infanta, el joven se levantó y sin dar explicación alguna, se alejó lentamente del lugar.
Unas semanas después, mientras deambulaba por un solitario camino, un niño de la comarca lo alcanzó y le preguntó a quemarropa ¿Qué fue lo que te ocurrió? Estabas a un paso de lograr la meta ¿Por qué perdiste esa oportunidad? ¿Por qué te retiraste?
Con profunda consternación y algunas lágrimas que corrían en su rostro, contestó en voz baja: "Ella NO me ahorró ni un día de sufrimiento, ni siquiera una hora, no merece mi amor"...
Cuando alguien que dice amarte solo te lastima, es tiempo de retirarte...
Equilibrio
Hace 1 mes